• 1/2 pechuga de pollo
  • 1/4 de pechuga de pavo
  • 3 ajos
  • 1/2 cebolleta
  • perejil picado
  • sal y pimienta
  • 1 huevo
  • 1/2 vaso de leche
  • pan rallado
  • aceite de oliva
  • 1 hoja de laurel
  • cúrcuma o colorante
  • orégano
  • vino blanco
  • vinagre
Vamos a empezar la semana con un plato sabroso, fácil  y que acompañado de unas patatas fritas en cuadros, un arroz blanco o pasta tendremos un plato único para cualquier día de la semana.
Espero que os apetezca probarlo.

Elaboración:
Pedir al pollero que nos pique la carne o bien comprar una bandeja ya preparada.
Pelar dos de los ajos, poner en un mortero y hacer un majado con sal y perejil, poner un poco de leche y mover para que se mezcle, añadir a la carne picada, que tendremos en un bol, junto con el huevo y el resto de la leche, dejar 1/2 hora en el frigo para que tome sabor.
Formar las albóndigas y freir en aceite de oliva caliente, sacar y escurrir sobre papel absorbente, yo lo hago en la Fc con muy poco aceite.
Picar la cebolleta y el ajo restante bien finos y pochar  junto con la hoja de laurel en el aceite donde hemos frito las albóndigas, si es mucha cantidad retirar un poco.
Una vez pochados añadir una cucharada de orégano seco de la mejor calidad posible y un pizca de cominos y una pizca de cúrcuma o colorante, mover y regar con un chorro de vinagre, poner las albóndigas en la cubeta y el vino blanco, dejar evaporar el alcohol y cerrar la olla, programar 10 minutos, válvula cerrada, cuando acabe si al abrir veis que la salsa está muy líquida podéis espesarla con una cucharadita de Maizena diliuida en tres cucharadas de agua y dándole un hervor.

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