Hasta que me vaya de vacaciones, para lo que desgraciadamente queda mucho, y espero poder irme, ya que según están las cosas es un lujo. Voy a mantener este ritmo, me ha parecido que tenía que aclararlo, por otra parte no se si voy a poder entrar en vuestros blogs porque ando aquí y allá y no siempre tengo conexión a mano.
Esta receta fue la primera con la que me metí en el mundo de las masas, por entonces no tenía ni panificadora, ni robot, solo mis manos así que me hizo mucha ilusión que saliera ten rica, desde entonces la he hecho varias veces, con panificadora (para amasar) o con robot, siempre ha salido perfecta.
La receta es de Vanessa, del blog Si no te gusta…échale azúcar.
Yo he hecho alguna variación.
Ingredientes
50 ml de anís
200 ml de leche
100 gr de margarina o aceite de oliva suave
1 cubo de levadura prensada
1 pizca de sal
2 huevos
650 gr de harina
100 gr de azúcar
Almíbar:
50 ml de agua
50 ml de anís
50 gr de azúcar
Crema pastelera express (Kanela y Limón)
250 ml de leche
2 huevos
20 gr de Maizena
una cucharadita de esencia de vainilla
50 gr de azúcar
una pizca de sal
Al lío!!!
Ponemos los ingredientes en la cubeta de la panificadora, primero los líquidos luego los sólidos. La levadura la disolvemos en un poco de leche tibia.Los huevos los batimos y los ponemos en la masa, reservando un par de cucharadas para pincelar la bolla una vez levada.
Ponemos el programa de amasado, cuando acabe sacamos la masa la dividimos en dos y ponemos sobre papel de horno dándole forma redonda y aplanando con las manos, hacemos unos cortes con un cuchillo bien afilado y dejamos levar en un lugar templado una hora.
Preparamos el almíbar poniendo todos los ingredientes en un cazo al fuego, cuando se deshaga el azúcar retiramos y dejamos enfriar.
Preparamos la crema pastelera batiendo todos los ingredientes con la batidora, llevamos al fuego y movemos continuamente hasta que espese, retiramos y cunado temple metemos en una manga pastelera.
Una vez que haya levado la masa rellenamos los cortes con la crema pastelera.
Precalentamos el horno a 180º con aire y una vez caliente metemos la bolla unos o minutos, vigilar que se hace rápido, cuando esté dorada sacamos y en caliente con un pulverizador o un pincel empapamos con el almíbar de anís.
Os aseguro que es deliciosa.
