«Dolos»,Bocaditos de nata y trufa.

Esta entrada esta dedicada a ella pero hoy es cumpleaños de mi duendecillo informático, mi sobrino y se que no dejaría ni uno… Felicidades corazón!!!!!

Pero por fin lo he conseguido gracias a mi Dololava, mi amiga Loli, fue la primera persona con la que hablé en este mundo virtual que ya se ha convertido en todo menos virtual, he conocido a tanta gente maravillosa y la que me queda. Pero entender que la primera que me contestó en un post fue ella y eso no se olvida.

Bueno pues esta paciente gallega entre el whatsapp y vía telefónica tuvo la paciencia de enseñar a esta inútil, eso si hasta ahora que conste jajaj, a preparar la pasta choux,  profiteroles,  petisus o como queráis llamarle o se llame.

Yo lo que se es que en casa a partir de ahora se llaman Dolos porque ella lo vale jajajaj

A mí no me salían y ahora se por qué, dejaba la pasta demasiado líquida y en el horno se expandían en vez de subir.

Ya no jeje salen perfectos.

Elaboración:

Poner en un cazo la leche, el agua, el azúcar y la sal, llevar a ebullición, cuando hierva bajar el fuego y añadir la mantequilla remover hasta que se disuelva. Momento en que añadiremos la harina de una sola vez sin dejar de remover y a fuego bajo, hasta que se despegue de las paredes la masa resultante y haya cocido un poco para que no sepa a crudo.

Dejamos enfriar.

Ponemos la masa en una amasadora si tenemos y si no a mano con una cuchara de madera vamos añadiendo los huevos de uno en uno, no incorporando el siguiente hasta que  el anterior se haya incorporado. debemos obtener una masa en la que una cucharilla se quede de pie, si os pasáis con los huevos no tendrá arreglo la masa, así que más vale quedarse cortos, ya que en vez de subir la masa se expandirá en el horno que era lo que a mi me ocurría.

Precalentar el horno a 200º.

Poner la masa en una bolsa de congelación o en una manga pastelera, ir poniendo porciones de masa sobre una bandeja de horno con base de papel o silpat.

Hornear durante  20/25 minutos, dejar otros 15 minutos en el horno apagado con la puerta entreabierta para que se sequen.

Una vez que se sequen, con un cuchillo de sierra hacerles un corte sin llegar a separar las mitades y rellenar al gusto:

crema pastelera, nata montada, trufa….

Yo los he rellenado unos con nata y otros con una ganaché de chocolate montada.

Para la ganaché poner a hervir nata y cuando empiece a hervir retirar del fuego y usar la misma cantidad de chocolate para cobertura, dejar que se deshaga remover y dejar enfriar unas horas en el frigo antes de montar.

El plato de presentación es un regalo de otra gran amiga Ana, manos de oro.